Da un paso al frente
Lee Daniel, capítulo 1
El ayuno no es un programa para perder peso o una dieta, sino una disciplina espiritual, diseñada para conectarnos más profunda y poderosamente con Dios.
¿Te has dado cuenta de que tu mente, tu alma, tu corazón y tu cuerpo trabajan juntos? Si tu salud mental experimenta un deterioro, también lo hace tu salud física. Si tu actividad decae, notarás tu mente nublada. Si tu salud espiritual declina, entonces tus emociones pueden variar.
El ayuno es una forma excelente de ayudarnos a restablecer el equilibrio en nuestras vidas silenciando las ruidosas demandas del lado físico y natural de nuestra humanidad. Al negar nuestros apetitos naturales que muchas veces buscan controlarnos, le damos a nuestro espíritu la oportunidad de desarrollar un mayor apetito por Dios y Su voluntad.
Durante los próximos 21 días vamos a elegir a Jesús por encima de los tacos, el café y quizás incluso las redes sociales y Netflix. No será fácil, especialmente al principio. La disciplina requiere enfoque, requiere esfuerzo y decisiones firmes sobre sentimientos e impulsos.
Daniel se encontró en una tierra extranjera, su hogar destruido; lo más probablemente es que su familia, sus amigos y todo lo que conocía desapareció también. Cada momento estaba marcado por la incertidumbre. Había nacido privilegiado (v. 3), pero ahora era esclavo. En una situación que provocaba en la mayoría un miedo y una desesperación tremendos, Daniel dio un paso al frente y pidió ser probado (v. 12), no sólo físicamente, sino también espiritualmente. Su valor y disciplina personal le llevaron a convertirse en una persona muy usada por Dios para influir en reyes y gobernantes.
Puede que te estés enfrentando a retos y situaciones que te asustan un poco... o mucho. Seguro que todos nos enfrentamos a la incertidumbre del futuro, pero Dios está buscando a aquellos valientes que den un paso al frente y pidan ser probados. ¿Serás tú uno de ellos?
¿Decidirás ser probado física y espiritualmente a pesar de las circunstancias en las que te encuentres?
La recompensa para Daniel no fueron riquezas o comida mejor, de hecho su comida real fue removida por los 3 años completos de entrenamiento después de esa prueba inicial (v. 17). Pero lo que Dios le dio a él y a sus amigos que se le unieron fue conocimiento y entendimiento 10 veces superior a otros sirvientes. A Daniel también se le dio la habilidad sobrenatural de interpretar sueños y visiones.
Cuando damos un paso adelante para Dios, eligiendo Su voluntad sobre la nuestra, podemos estar seguros de que Él también se acercará a nosotros y nos equipará para la tarea que tiene por delante.
¿Qué puedo hacer hoy?
-
Pide al Señor que te ayude a disciplinar tu mente y tu cuerpo durante el ayuno. Comienza a hacer tu parte y espera que Él responda a esta oración.
-
Si estás preparado para dar un paso adelante, invítale a que te ponga a prueba. Y prepárate para Su respuesta al respecto.
-
Pídele que te dé las herramientas que necesitas para completar la prueba y recibir Su recompensa.
-
Dedica tiempo y espacio para acercarte a Dios. Espera que Él se acerque a ti.
-
Lleva un diario. Anota tus pensamientos, tus oraciones, lo que te ha llamado la atención al leer la Biblia. Será bueno poder leer en retrospectiva a dónde te ha llevado este viaje después de los 21 días.
-
Lecturas adicionales sugeridas:
Santiago 4:8, 1 Corintios 9:24-27.